El final de las concesiones administrativas de los clubes náuticos en Catalunya está provocando que muchos o bien estén luchando por sobrevivir como tales, sin ánimo de lucro y apostando por el deporte, o bien pasan a ser una marina con el objetivo de ganar dinero para la iniciativa privada.
La actual legislación catalana no favorece en nada a que los actuales clubes y arrendatarios de un trozo de tierra y agua puedan seguir con su actividad de promoción y escuela de una forma más o menos tranquila, sino que en muchos casos favorecen la aparición de sociedades anónimas que buscan hacerse con este espacio de mar para hacer un parking de barcos y dejando la actividad deportiva en un segundo o tercer plano solo para cubrir el expediente.
El llamado ‘oasis catalán’, como así le bautizó Miquel Mallafré en un más que recomendable artículo para conocer la realidad que viven los clubes catalanes publicado en Panorama Náutico, se ha roto y muchas marinas han acechado a estas clubes aprovechando su fuerza económica para intentar hacerse con las concesiones que tienen clubes que están mantenidos por sus socios desde hace décadas, algunos de ellos casi centenarios.
El Club Nàutic Garraf ha sido el último en sufrir en sus propias carnes el ataque por parte de estas empresas. En esta caso han sido sus vecinos de Port Ginesta S.A, –marina situada a apenas una milla de distancia- la que ha querido hacerse con los mandos del club.
Evidentemente que todo la ley es la que es y que todo el mundo tiene derecho a pujar y a presentar proyectos, pero esto también ha provocado que los clubes náuticos tengan que hipotecarse hasta las trancas para poder mantenerse como tales y que tengan que ir a máximos, y que tengan que pagar un canon muy superior durante los próximos 25 años.
El Club Nàutic Garraf, que preside Tony Colom, ha sufrido mucho en los últimos meses, pero finalmente han conseguido ser mejores y renovar así su concesión.
Eso sí después de sangre, esfuerzo, sudor y lágrimas, el club seguirá vivo y la promoción deportiva garantizada. ¿No sería mejor que las marinas liciten para ser marinas y los clubes para ser clubes?
Y yo le pregunto a la Generalitat de Catalunya si le compensa que los clubes náuticos tengan que pasar por este duro trance.
MOLTA ALEGRÍA AL SABER QUE LA NOTICIA DE QUE PORT GINESTA VOLIA INTEGRAR C N GARRAF NO ES CERTA:
Felicitacions al President TONY COLOM per haver-ho aconseguit, i sort amb la nova concessió.
Los clubes no untan a políticos las empresas que gestionan marinas si, esa es la diferencia.
Las sociedades son mas baratas para los usuarios que los «Clubs»con sueldos y derroches.
Le reto a que mencione un puerto mas barato cerca suyo…
¿Tony Colom que barco tiene usted en su club?
Pais de Pastores y ovejas…