Como ya ocurriera en los Juegos Olímpicos de Río 2016, Nueva Zelanda ha vuelto a renunciar a la plaza olímpica en la clase Laser Radial y España ha acabado siendo la gran beneficiada de cara a Tokio 2020. Misma circunstancia, mismos protagonistas.
En Nueva Zelanda son muy exigentes y consideran que a los Juegos Olímpicos tienen que ir tripulaciones que tengan opciones ya no a medalla, sino a diploma olímpico. Si no es así, prefieren centrar todos sus esfuerzos en el resto de clases.
En esta ocasión se repitió la historia y una vez están clasificados los países, si alguno renuncia, esta plaza pasa al primer país que había quedado por detrás en la última regata clasificatoria. En este caso era el Campeonato del Mundo de 2019. Si Nueva Zelanda no hubiera renunciado a esta plaza, las regatistas españolas hubieran tenido que ir a la última regata clasificatoria, como así ocurre con el Laser Standard y el Finn, donde España aún no ha conseguido la plaza para Tokio 2020.
De esta forma España cuenta ya con ocho clase confirmadas: 49er, 49er FX, Nacra 17, 470 Femenino, 470 Masculino, RS:X Femenino, RS:X Masculino y Laser Radial.
Ahora esta plaza para la clase femenina Laser Radial quedará pendiente de ratificación por criterios técnicos por parte de la RFEV. En los pasados Juegos Olímpicos, la federación puso como regata clasificatoria la Kieler Woche, y la española que quedara en mejor posición sería la que fuera a Río 2016, en aquel caso sería la tinerfeña Alicia Cebrián.